21 de diciembre de 2024

Transformando la Movilidad en Oaxaca

Mi ciclo como Asesor en el sector transporte y movilidad en Oaxaca ha concluido tras dos años de aprendizajes y retos. Ete periodo me permitió entender el contexto de un gobierno local que, tras años de rezago, se propuso reducir brechas de desigualdad en diversos sectores, incluyendo el transporte. En Oaxaca, este sector ha sido históricamente utilizado como moneda de cambio político, alejándose de su propósito de servir a la población. Mi compromiso estuvo enfocado en fortalecer y mejorar la oferta de transporte público colectivo, que ha perdido terreno frente al transporte individual de baja capacidad, como se refleja en la siguiente gráfica. Lo que comparto a continuación resume las acciones implementadas para sentar las bases de la transformación de la movilidad en el estado.

SOBRE-CONCESIONAMIENTO DEL TRANSPORTE INDIVIDUAL Y DECLIVE DEL TRANSPORTE COLECTIVO EN OAXACA 1989-2022
Fuente: Primer Informe de Gobierno del Estado de Oaxaca, 2023.

La movilidad es un eje esencial para el desarrollo de cualquier ciudad, y en Oaxaca no es la excepción. Durante mi periodo como Asesor en la Secretaría de Movilidad de Oaxaca, enfrentamos retos estructurales que limitaban el avance de los proyectos estratégicos en movilidad. La falta de coordinación entre las áreas de Planeación y Transporte, así como la carencia de personal especializado en gestión y políticas públicas, dificultaron la consolidación de un sistema de transporte eficiente y accesible. Ante esta situación, mi primera tarea fue realizar un diagnóstico exhaustivo para identificar las principales áreas de mejora y establecer las bases de un plan de acción de 100 días y posteriormente un plan de trabajo para los próximos años.

Unidad de transporte metropolitano Citybus en las calles de Oaxaca

Uno de los logros fue el programa piloto “Oaxaca Camina”, enfocado en crear calles de prioridad peatonal y fomentar espacios más seguros y accesibles para las personas; mismas que pasaron de la intervención temporal a una calle permanente totalmente caminable. Además, se trabajó en conjunto con la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU) para implementar estrategias contra el acoso en el transporte público que se implementan en diferentes rutas y municipios del Estado. Lo que llevó a diseñar un Protocolo único para Oaxaca con el trabajo interinstitucional de las áreas de Semovi y otras dependencias de Gobierno del Estado de Oaxaca.

Puesta en marcha del primer "Protocolo contra el acoso sexual en el transporte público de Oaxaca"

También organizamos foros ciudadanos en las ocho regiones del estado para incorporar la voz de la sociedad en la armonización de la Ley de Movilidad. Así mismo se instaló por primera ocasión el Consejo Estatal de Movilidad y las mesas de trabajo con la asistencia del Gobernador demostrando el enfoque participativo y que estará en vías de publicación próximamente.

Calles de prioridad peatonal "Oaxaca Camina"

Además, se avanzó en la implementación de estrategias como la digitalización de trámites, impulsando la firma de un convenio con la Agencia Digital de Innovación Pública y Tecnologías de la CDMX y el Gobierno de Oaxaca. Lo anterior, dio inicio a una nueva etapa para acercar los trámites a la ciudadanía. Asimismo pusimos en marcha el primer Portal de Datos abiertos en materia de Movilidad para Oaxaca, mismo que fue premiado por el Órgano Garante de Acceso a la Información Pública al publicar información actualizada de rutas de transporte, módulos de servicio, infraestructura ciclista entre otros.

Portal de Datos abiertos de Movilidad de Oaxaca

En coordinación con la Secretaría de Finanzas  en el marco de la consolidación de los Polos de Desarrollo del Corredor Transístmico publicamos los lineamientos para la adquisición de vehículos seguros que le valió el reconocimiento a la Secretaría de Movilidad y el Gobierno del Estado de Oaxaca por la Cruz Roja denominado “Acuerdo por flotillas seguras en México y sus Distintivos por la seguridad vehicular”. Esto no hubiera sido posible sin el acompañamiento técnico de la organización Instituto Sur durante todo el proceso.

El Citybus como protagónista de una calenda en Oaxaca.

La puesta en marcha de la primera ruta del Sistema Integrado de Transporte Citybus fue el gran hito clave. A través de un exhaustivo análisis técnico, financiero y operativo, en coordinación con el Ente Gestor Citybus se logró regularizar el proyecto ante Banobras y poner en marcha las primeras rutas estructuradas en Oaxaca, cubriendo zonas históricamente desatendidas de la ciudad, con el deseo de verlo concluido y siendo referencia en otros municipios con los mismos retos que enfrenta el transporte urbano. Este esfuerzo ha ganado la confiancia de la gente en el proyecto; que además se complementó con estudios de factibilidad para garantizar la operación eficiente de las rutas, marcando un precedente para el desarrollo de un transporte público moderno y funcional en la entidad.

Muestras de apoyo al crecimiento del Sistema Integrado de Transporte Citybus

Con el objetivo de complementar el "Modelo de Negocio" del Proyecto Citybus y renovar la flota, tuve la responsabilidad de realizar las gestiones para realizar ejercicios operativos de seis unidades de prueba de distinta tecnología, dimensiones y equipamiento en las rutas de Citybus, incluyendo presentaciones con armadoras y concesionarios, además de recorridos y pruebas de manejo. Los resultados se consolidaron en un informe sobre las características de las unidades (pendiente de publicar) para su integración al Corredor Troncal del próximo Sistema Integrado de Transporte Citybus. Uno de los proyectos con mucho potencial que después de dos administraciones estatales sin operar, está siendo referente del impacto que hay a partir de una adecuada gestión del transporte.

Unidades de Prueba puestas en marcha en Oaxaca.

La coordinación con agencias de cooperación internacional jugó un papel crucial en la transformación de la movilidad en Oaxaca y asimismo posicionar a la entidad en el sector transporte. El BID México realizó dos estudios para establecer la viabilidad técnica, operativa y financiera de un sistema de bicicletas públicas y de una estrategia para la implementación y gestión del tránsito en calles del centro histórico de Oaxaca lo que permitirá en la nueva transición con el municipio, la adopción de una movilidad más sustentable. 

Entre las acciones realizadas en el marco de la Cooperación Internacional Alemana-GIZ se pueden enunciar la hoja de ruta para fortalecer el Sistema Integrado de Transporte Citybus en Oaxaca, un  análisis financiero para iniciar con la transformación del modelo hombre-camión a ruta-empresa, la organización del primer evento y publicación del portal de “Datos Abiertos en Oaxaca”, El primer evento “Juntas nos movemos: Intercambio de buenas prácticas para una movilidad más inclusiva y segura” con exponentes internacionales. Así como la estrategia “Mujeres moviendo Oaxaca” para incorporar más mujeres en el sector transporte. En cuanto a la digitalización, se impulsó la actualización de las Cédulas de Evaluación para transporte público. Lo anterior de la mano de las áreas de la Semovi.

Evento organizado con GIZ: "Juntas nos movemos"

Desde mi perspectiva; estos avances no solo mejoran el presente, sino que trazan un camino hacia el futuro de la movilidad en Oaxaca. Esto es un fragmento de lo hecho por un equipo interdisciplinario con amplia experiencia en el sector y sobre todo comprometido con la agenda de movilidad. La integración de tecnología, el fortalecimiento de la infraestructura y la cooperación estratégica con organismos nacionales e internacionales fueron pilares fundamentales para la construcción hacia un sistema de transporte público eficiente, accesible y alineado con las necesidades de la ciudadanía. Aún quedan muchos pendientes, pero un equipo comprometido seguirá impulsando el plan trazado con determinación y una visión clara de transformar la movilidad en Oaxaca. El horizonte de la movilidad es claro; transicionar hacia un sistema de transporte más inclusivo, eficiente y conectado, donde la toma de decisión técnica y la planeación juegan un papel central en la construcción de un futuro mejor para las y los oaxaqueños. Gracias Oaxaca!

Reconocimiento a la "Plataforma de Datos Abiertos" de Movilidad.

4 de noviembre de 2024

El incremento en la tarifa; una oportunidad única hacia un Sistema Integrado de Transporte en Oaxaca.

El miércoles 6 de noviembre entró en vigor el aumento de tarifa del transporte urbano en la ciudad de Oaxaca. Si bien este aumento impacta a más de un alto porcentaje de la población que se desplaza en transporte público; este incremento viene acompañado de un plan para consolidar un sistema integrado de transporte Citybus en Oaxaca. Entre los anuncios, la Secretaría de Movilidad (video1, video 2 y video 3) destaca la meta de reestructurar en su totalidad más de 30 rutas, concluyendo al 2028; se conformará una única ruta-empresa y se comprarán 50 nuevas unidades de más de 200 que se tienen consideradas para el primer semestre del siguiente año y cerrar la administración con un 20% de flota electrica.



Fuente: Imagen Propia

Un análisis de los periodos de aumento de tarifas en Oaxaca revela que, históricamente, el ajuste se realizaba cada tres años. La última tarifa autorizada fue en 2018, lo que generó una brecha de seis años sin actualizaciones. Esta situación, similar a la de otras ciudades, resultó en una flota vehicular obsoleta y una limitada profesionalización de los operadores. Desde la perspectiva de los transportistas, esto ha provocado una pérdida de ingresos, aumento de costos, abandono de rutas y deterioro de las unidades. Por parte de los usuarios, el transporte refleja décadas de un servicio que no ha podido satisfacer plenamente sus necesidades de movilidad, dejando un notable rezago.



Fuente: Elaboración propia a partir de un análisis hemerográfico

En el contexto nacional, Oaxaca se encuentra entre las ciudades con tarifas de transporte urbano más bajas, con un costo de $8.00, mientras que el promedio en el país es de $9.79. El reciente aumento a $10 acerca a Oaxaca a esta media nacional. ¿Qué sucedería si mantuviéramos esta tarifa? El continuar con una tarifa sin movimiento, sería insostenible frente a los costos de operación, por otro lado, impediría cumplir con el objetivo de compra de nuevos autobuses con mejor tecnología y la profesionalización de operadores para ofrecer un mejor servicio.


Fuente: Elaboración propia a partir de un análisis hemerográfico

Ante el aumento de tarifas, diversas ciudades han implementado medidas que combinan incentivos y restricciones para mejorar el transporte público. En Oaxaca, se busca pasar del modelo de operación hombre-camión al de ruta-empresa, comprometiendo a los transportistas a mejorar el servicio. Este cambio se alinea con la Política Nacional de Transporte Público, que diagnostica que el 85% de los servicios en el país operan bajo concesión, lo cual genera una baja calidad en el servicio, largos tiempos de traslado, uso excesivo de efectivo, inseguridad y altos costos ambientales.

Imagen: Comparativa en el modelo tradiciona v.s. el modelo de transporte integrado (Citybus en caso de Oaxaca)

Fuente: Política Nacional de Transporte Público Colectivo Urbano

Con la finalidad de poner un mayor orden ante el alza de tarifa, entre las acciones que otras ciudades han adoptado se encuentran la firma de acuerdos con concesionarios para la integración al sistema de transporte integrado (en este caso Citybus), la creación de mecanismos de sanción, supervisión a las alzas de tarifa no autorizadas, incentivar la revisión físico-mecánica y regularización de unidades de transporte y la capacitación teórica y práctica de operadores de transporte. Este aumento tarifario es una oportunidad única para lograr un arreglo institucional entre las autoridades y el transporte concesionado, priorizando la calidad y servicio hacia las personas usuarias.

La noticia aún es reciente, y el descontento de un sector de la población solo podrá abordarse con un seguimiento más cercano a las quejas ciudadanas y, sobre todo, con la implementación efectiva del plan para consolidar el Sistema Integrado de Transporte. Este plan ya ha comenzado con la puesta en marcha de cuatro nuevas rutas. Los datos y la opinión ciudadana son claros: más del 64% de los encuestados se manifestaron a favor de un aumento en la tarifa de uno o más pesos, siempre que se adquieran de forma permanente unidades como las de tipo "Híbrido" o "Diésel Euro VI" y fueran adquiridas de forma permanente y sustituyeran las viejas unidades. Cabe mencionar que estas unidades tuvieron sus pruebas de circulación hace unos meses en Oaxaca.


Fuente: propia. Unidades de prueba en Oaxaca

Las personas usuarias del transporte buscan la consolidación de un servicio moderno y eficiente que brinde un mejor futuro para la movilidad en Oaxaca y será clave que las personas concesionarias adopten un nuevo modelo y busquen transicionar hacia un sistema de transporte integrado que privilegie la eficiencia, la seguridad, el uso de tecnología actualizada, así como la ambiental y un buen servicio por parte de las personas conductoras.


Fuente: propia. Unidades de prueba en Oaxaca

Han pasado seis años desde la última actualización de la tarifa en Oaxaca. El abandono del servicio por parte de administraciones anteriores, la disminución en la demanda y el aumento de los costos operativos de las unidades han sido factores determinantes en la necesidad de este ajuste. Esta situación representa una oportunidad única para culminar la transformación del transporte urbano en Oaxaca, un modelo que podría replicarse en otras ciudades como Huatulco, Salina Cruz y Tuxtepec, donde el transporte urbano aún persiste pero enfrenta similares desafíos.


23 de enero de 2021

El Transporte Emergente al frente

Dedicado todas y todos quienes, con su labor, garantizan el traslado de las personas a su destino.

Era sábado 9 de enero del 2021 y la noticia comenzaba a aparecer en distintos medios. La Subestación del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro estaba incendiándose, personal del Metro estaba en proceso de ser evacuada por el Cuerpo de Bomberos. El balance arrojaba seis de las doce líneas de Metro fuera de servicio, un centro de control con daños mayores, y el deceso de una oficial en turno. A primera hora los grupos de chat del trabajo se activaron; entre ellos, los de enlace con la Red de Movilidad Integrada de la Ciudad de México, el chat del personal de análisis y planeación del transporte, el de operativos y otros más. El objetivo primordial en el corto plazo sería garantizar el traslado de alrededor de 1.4 millones, 54% respecto al total de personas usuarias del Metro.

Afluencia promedio diaria por Línea de Metro.


 
Fuente : Elaboración propia, a partir de operación, Metro 2020.

Sin fechas de restablecimiento del servicio Metro; la Secretaría de Movilidad (Semovi) en coordinación con la Red de Transporte de Pasajeros (RTP) comenzó a redistribuir el parque vehicular de sus servicios regulares en las estaciones y las seis Líneas de Metro fuera de servicio; sin embargo, no sería el único organismo de transporte en contribuir. En este contexto y a marchas forzadas, por medio de videollamadas entre diferentes áreas de la Semovi comenzamos a plantear una estrategia integral para cubrir efectivamente el servicio de transporte en el mediano y largo plazo, hasta el restablecimiento total en las seis líneas de Metro. Con este texto; desde la perspectiva personal, trato de forma somera y hasta parcialmente, la experiencia detrás del trabajo de la estrategia de “Transporte Emergente”.

    Tras el incendio, la estrategia para garantizar el traslado de personas sin seis líneas de Metro comenzó con un Centro de Mando (CM) coordinado con otras dependencias y comunicando en tiempo real las afectaciones. Por otro lado, el equipo técnico comenzó por cruzar información con los Organismos de Transporte (compuesto por la Red de Transporte de Pasajeros, Sistema Metrobús, Sistema de Transportes Eléctricos, Corredores de Transporte) y las Rutas de Transporte Concesionado que operaban como servicios alimentadores o que corrían en paralelo con las seis líneas de Metro fuera de servicio para contactarlas y solicitar su apoyo en el traslado de personas.

    La capacidad técnica y experiencia del personal de la Semovi permitió trazar una ruta crítica para enfrentar la emergencia en materia de transporte, de manera sistemática. Se comenzó junto con los Organismos de Transporte a realizar los cálculos de dimensionamiento o tamaño del parque vehicular necesario para cubrir la demanda de millones de viajes en el Metro. Si bien se ha fortalecido a los organismos de transporte con más y mejores unidades; frente al volumen de usuarios del Metro se necesitaba más apoyo para cubrir la demanda de viajes, el cual encontramos en el Transporte Concesionado; aquel que con cada acción del Programa de Regulación puesto en marcha por Semovi, desde mediados del 2020 ha permitido tener un mayor nivel de comunicación, capacidad organizativa y supervisión en la operación.

Al concluir el trabajo de escritorio y tras las actualizaciones del diagnóstico compartido por el Centro de Mando, de carácter Interinstitucional, surgió la necesidad de acompañar al equipo en campo con otras dependencias como Instituto Nacional de Verificación Administrativa (Invea) y de SSC Tránsito en nodos con alta concentración de viajes. El equipo en campo permitió monitorear rutas de transporte de apoyo, características de unidades, sitios de ascenso y descenso, gratuidad del servicio a personas vulnerables, tarifas de cobro, accesibilidad del sitio, conflictos en materia vial, balizamiento, señalización y obras de mejoramiento.

Unidades de RTP en apoyo al Metro y la Red de Transporte Emergente
Fuente: Foto propia.

    Ese mismo día, a altas horas de la noche se desarrollaba una última reunión para definir roles y responsabilidades para comenzar la operación los siguientes días. La retroalimentación del personal en campo fue fundamental y con una comunicación constante  y a distancia, se obtuvo una Red de Transporte Emergente e integrada para ser implementada. La estrategia inició antes de las cinco de la mañana el lunes 11 de enero. Desde el Centro de Mando y con personal en campo se detectaron gradualmente áreas de oportunidad; entre ellas: mayor comunicación, información y señalización al usuario, cumplir con servicios de transporte programados, ampliar unidades en horas de máxima demanda, fortalecer las medidas sanitarias en el transporte, activar operativos de sanción y supervisión, entre otros. 


Foto propia: Jornada durante los primeros días

    Una de las tareas fundamentales del esquema de operación dentro de la estrategia  fue la comunicación e información en tiempo real, que permite, a la fecha, balancear la oferta de unidades en los 19 nodos de transporte y cumplir con la demanda de usuarios. Entre el personal que cubre la operación en sustitución de las líneas de Metro y los días; se ha manteniendo el ritmo de trabajo, cuidado las jornadas y facilitando turnos del ya reducido personal operativo en el contexto de la pandemia. De esta forma se pone atención al cuidado, el desgaste mental y físico; así como el compromiso por apoyar a la ciudadanía. 

Nodos de la Red de Transporte Emergente

Fuente: (Semovi, 2021)

   Un día ordinario comienza poco antes de las cinco de la mañana; el personal llega a un nodo, se cuentan unidades por línea, se abren las pasarelas del Metro para mejor transbordo y seguridad de personas usuarias, preparan el material como cubrebocas, gel, megáfono, reconocimiento de personal en turno, cuentan usuarios en fila, se comunican con la coordinación de otros nodos para reducir frecuencias de paso o confirmar relevos, preparan un reporte detallado; continuando hasta finalizar a la media noche, con los últimos autobuses moviendo a la gente a sus destinos. Sin el compromiso del equipo en campo para reportar constantemente en grupos de chat y diversos canales de comunicación, las métricas clave de operación como frecuencias, tiempos de espera de usuarios, ocupación de unidades y retrasos; sería imposible evaluar y mejorar cada día. 

    Derivado de esta estrategia interinstitucional, cada día por instrucciones de la Jefa de Gobierno a las 13 hrs se transmitirá un informe compartido con la Directora del Metro y el Secretario de Movilidad, comunicando  los avances para restituir las líneas del Metro y los pormenores de los Servicios de Transporte Emergente y cuyo formato se asimila a la “Tardeada del Transporte” donde se ve reflejado el trabajo de quienes con su labor, garantizan la operación de la Red de Transporte Emergente. 

    Entre los resultados por semana del despliegue de personal y coordinación se encuentran los tiempos promedio de espera de usuarios del transporte por línea que en horas de máxima demanda se han logrado reducir de 9.1 a 6.1 minutos, siendo esta mejora más evidente en servicios emergentes de Línea 3. En cuanto a ocupación se refiere y considerando la actual pandemia es importante mantener bajo este indicador, en este sentido, la ocupación promedio de unidades en las tres líneas ha permanecido por debajo del 60% durante la primera semana, mientras que la segunda semana esta se redujo a 49%, tendencia que se explica por la integración de más parque vehicular al igual que al despacho continuo de unidades por parte del personal.

Reporte de Operación de la Red de Transporte Emergente (22/01/2021)


Fuente: (Semovi, 2021)

    Estas mejoras en la operación, se complementan con testimonios aun más interesantes sobre la configuración de los viajes de los propios usuarios, tanto en notas de prensa que por un lado resaltan la adaptación y comprensión ante la ausencia del Metro y por otro lado la sorpresa de abordar unidades que nunca habían usado, como el Transporte Turístico (unidades de dos pisos que apoyaron a cubrir el servicio emergente de Línea 3). Otro testimonio durante mis guardias fueron los de una señora que a sus 40 años de usar toda su vida la estación de Metro Hidalgo; fue en este contexto que le permitió conocer las nuevas unidades de Trolebús de Eje Central que dejó de usar porque “tardaban mucho” y que ahora esta alternativa pudiera ser su nueva ruta.

Como mencioné al inicio, además de la Red de Movilidad Integrada se sumaron unidades de Transporte Concesionado, Transporte Escolar, Transporte Turístico y el Mexibús del Estado de México; aumentando frecuencias, reduciendo la ocupación de unidades y tiempos de espera. Así, desde la primera semana el parque vehicular de la Red de Transporte Emergente contaba con 1, 197 unidades, mientras que al 22 de enero el parque vehicular se incrementó a 1, 405 unidades (+17%) destinados a cubrir diariamente la demanda de viajes. De la misma forma, el personal en campo incrementó de 1, 550 a 2, 339 personas en actividades operativas y administrativas, entre ellas personal de Semovi, del Metro, Pilares, de los Organismos de Transporte, Secretaría de Cultura entre otras dependencias, participaron.

Parque vehicular y personal operativo de la Red de Transporte Emergente
(12/01/2021 y 22/01/2021)

Fuente: (Semovi, 2021)

Próxima estación, restablecimiento...

Es la madrugada del sábado, ha acabado mi turno a las 12 de la noche, se cumplen dos semanas de haberse concebido la estrategia de Transporte Emergente y de agradecer la comprensión de las personas usuarias y al Metro por su constante atención. La Red de Movilidad Integrada en esta administración y en este contexto, dejó de ser un mero concepto intangible que, en medio de una emergencia, se ha vuelto más visible que nunca en las calles y regulado para beneficio de todas las personas usuarias. La Red de Movilidad Integrada nunca se ha vuelto más fortalecida, visible y solidaria en las calles, como ahora. El transporte público seguirá siendo fundamental e imprescindible para la población en una ciudad de escala metropolitana.

Tres de las seis líneas de Metro fuera de servicio ya se restablecieron y a dos semanas del incidente, la Línea 1 comenzó a operar nuevamente; superando cualquier pronóstico. De acuerdo a los informes del propio Metro presentados el 23 de enero del presente, en los últimos tres años ha habido una inversión histórica del 2018 al 2020 en el Metro con un incremento de 58% en las partidas de mantenimiento y de 68% en materia de refacciones. Esta inversión ha permitido reducir en 47% los retrasos de operación durante este mismo periodo, lo que permitirá el restablecimiento de las dos líneas de Metro restantes.

La estrategia de Transporte Emergente de la Ciudad de México continúa operando con números positivos, se han cubierto los viajes con el único gran objetivo de no dejar a nadie sin llegar a su destino y hemos profesionalizado la operación con el paso de los días. Aún hay muchas perspectivas por analizar de este evento, como la articulación metropolitana en materia de transporte, para que servicios como Mexibús ingresen a la Ciudad de México y convivan con el sistema Metrobús, un hecho sin precedentes, pues es la primera vez en la historia del transporte semi-masivo que esto ocurre. La inversión realizada por el Gobierno de la Ciudad de México para la adquisición de más de ochocientas unidades que ha permitido a RTP apoyar en esta emergencia sanitaria, para el traslado del personal médico y para apoyar al Metro.

Los mas de ochenta nuevos Trolebuses y su inversión igual relevante e histórica, ha permitido ampliar el recorrido en una de sus líneas a Metro Pantitlán, registrando incremento en su demanda y demostrando que las mejoras tecnológicas adquieren mayor sentido cuando se busca un transporte que llegue a donde la gente lo requiere y no solo eso, sino con unidades articuladas que permiten mayor ocupación con sana distancia. De la misma forma, Metrobús integró una de las diez unidades eléctricas en la Línea 4 con ampliaciones de recorrido a Pantitlán, también inició el apoyo en Línea 2 del Metro con unidades articuladas circulando en avenida Tlalpan, diversificando las alternativas de recorridos a usuarios

Unidades de Metrobús en Av. Tlalpan 


Unidades de Trolebús con ampliación de recorrido al CETRAM Pantitlán

Convencido estoy de que el camino que debemos seguir es el de continuar visibilizando la importancia del transporte masivo como el Metro, al igual que la continua mejora en la calidad de la Red de Movilidad Integrada y el Transporte Público.

15 de diciembre de 2019

Mejores autobuses, mejores ciudades


Sabemos que se necesita para operar redes de autobuses que los usuarios amen: servicio frecuente, rápido, y seguro "[...]" sin embargo, muchos de los viajes en autobús son miserables, gracias a un sistema político que es indiferente o incluso hostil a los autobuses y a las personas que los usan. Steven Higashide (2019) 




Recientemente distintas ciudades han volteado y reconocido la importancia del autobús en la cadena de viajes. Lo anterior es producto también del descontento de los usuarios quienes se apropian inmediatamente de un proyecto de transporte, cuando les beneficia; tal como sucedió en Seattle con uno de los primeros proyectos de carriles exclusivos de autobuses en donde ciudadanos defendieron y liberaron estos carriles de invasiones por vehículos de terceros. Comencé a seguir esta fenómeno a partir de un post “Love the Bus, save the City” por Laura Bliss en CityLab y me convencí que la próxima revolución del transporte urbano debería suceder en los autobuses. Lo anterior no es nuevo, en España hay movilizaciones con un amplio número de usuarios de transporte exigiendo continuamente mejoras al servicio de autobuses de la EMT. Semanas después llegó la publicación del libro de Steven Higashide “Better Buses, Better Cities” que inmediatamente adquirí y del cual les compartiré mis impresiones.




Como decía, el ejemplo más claro de este nueva ola por posicionar al autobús en la ciudad, son los pilotos y eventuales proyectos permanentes de carriles exclusivos para su circulación. En los últimos meses, diferentes ciudades; especialmente de Norteamérica han implementado estas prácticas, incluso la Ciudad de México se unió a esta nueva ola de la movilidad con algunos pilotos en corredores de transporte con resultados positivos en los tiempos de viaje; acá la liga.




El libro “Better Buses, Better Cities” de Steven Higashide, aborda de manera dinámica y concisa cómo reposicionar el servicio de autobuses a través de diferentes elementos que componen su operación. Es importante decir que el libro retrata el involucramiento de actores; especialmente vecinos, profesionistas de transporte y autoridades de manera estratégica para mejorar el servicio de transporte. Al final de su lectura, desearás que el autor fuera más extenso sobre el proceso que derivó en la mejora de calidad del viaje a través de la toma de decisiones. A partir de su experiencia como activista y profesión, Higashide  inicia la conversación aclarando que la mejor estrategia para mejorar el servicio es entender cómo opera y por qué los usuarios viajan en determinada línea de autobús; si no comprendes estas razones, será difícil plantear cambios o mejoras al mismo.

En los capítulos siguientes el autor describe la manera de lograr que el servicio de autobús sea frecuente a partir de las compensaciones de demanda de viajes vis a vis cobertura de transporte y apoyándose de la teoría de Jarret Walker (Human Tránsit). En el capítulo siguiente narra cómo el desplazamiento de la lava de un volcán activo puede llegar a desplazarse más rápido que el servicio de autobuses en algunas ciudades. Al respecto, más allá que los autobuses vayan rápido, lo importante es identificar los obstáculos, el diseño de calles y aquello que sucede en un corredor de transporte que reduce su nivel de servicio y confianza en los usuarios. Con la finalidad de mitigar malas prácticas, Higashide menciona que no se trata únicamente de implementar carriles exclusivos sino de un proyecto integral de transporte que puede implicar configurar fases semafóricas, atendiendo intersecciones conflictivas, regulación de áreas de ascenso y descenso; además de fiscalizar su operación; entre otras medidas. 


No importa si tienes un servicio de autobuses con alta frecuencia y confiable, si no garantizas una experiencia peatonal grata a los usuarios. Lo anterior es importante, sin embargo hay un debate constate sobre la competencia, responsabilidad o facultades que tienen las autoridades u organismos de transporte sobre la infraestructura peatonal ya que se encuentra en un “área gris” en diferentes contextos y ciudades. A pesar de esto, mejorar las condiciones de espera y caminabilidad hacia el transporte es crucial. Otro punto importante abordado es lograr un servicio de autobuses justo y equitativo. No sólo es importante diversificar las formas de pago, sino iniciar conversaciones complejas y difíciles sobre los esquemas tarifarios cuya política favorezca principalmente a los estratos sociales más bajos y usuarios de transporte, obteniendo un impacto equitativo.

Para ir cerrando la lectura, Higashide narra su experiencia como intermediario en la ampliación de un servicio de transporte en el que la importancia de los activistas y vecinos fue fundamental ya que idearon campañas, acciones,  probaron la utilidad de una línea de autobuses y el sector privado fue convencido gracias a una narrativa que colocaba a la línea de autobuses ser considerada como un factor de competitividad económica. 

Finalmente Higashide aborda las formas en que estructuralmente el fondo federal de transporte en Estados Unidos facilita su gasto en infraestructura gris (infraestructura vial). En principio es contradictorio porque a pesar de que es un "Fondo de Transporte", sólo el 24% del total del fondo está etiquetado a transporte público. No sólo hay una flexibilidad en el termino, sino que este sólo se considera para infraestructura principalmente. A partir de esto, el autor se cuestiona: por qué únicamente se etiqueta un gasto federal para infraestructura de transporte y no fondos para la operación de transporte (organismos de transporte, centros de datos, estudios e investigaciones) o para áreas relacionadas a la operación (mejora de infraestructura peatonal, de accesibilidad, de orientación e información) y muy importante para los operadores (a través de capacitaciones, despachadores, cursos de actualización e incluso mejora de las condiciones laborales) porque ciertamente no sirve de mucho adquirir infraestructura (Flota de transporte o ampliar líneas de tren o transporte) si no hay suficiente personal que este en condiciones de operarlo.
Dignificar al operador de autobús.
Considerando que en la ZMVM  habitan alrededor de 15 millones de personas y que 76% de ellas se desplazan en transporte Colectivo; el volumen de viajes y reparto modal lo  convierte en un transporte indispensable sobretodo en zonas, donde los servicios como el BRT o un transporte como el Metro no pueden cubrir. Espero puedan adquirir el libro e inspirarse para impulsar un servicio de autobús digno de sus usuarios!